Ya no quiero verte desnuda,
no puedo más pasear por tu cintura.
Cúbrete ya no despiertas en mi ningún deseo,
hace tiempo dejo de gustarme lo que veo.
¡Cuánto tú has cambiado querida mía!
Tus contornos no son lo que solían,
si hasta tus montañas se han caído
esas por las que estaba tan atraído.
Por favor no me tomes por superficial
porque este sentir va más allá de lo visual,
es más bien por tu cambio de personalidad
por ser capitalista y propensa a la agresividad.
Mi isla ya no quiero verte más desnuda
tampoco en ese vestido teñido en sangre
ponte el verde con el que te veías tan pura
vuelve a ser el Puerto Rico noble de antes.